Miro el cielo negro de estrellas brillantes al azar,
albergo el frío universo,
capturo ese inmenso firmamento en mi pensar...
Luego tendré que descansar,
el cansancio no es del cuerpo,
es mental,
atrapado en sinrazones,
sin piedad...
preparado para todo me defiendo de este mal,
creo poder subir ese oscuro pedestal,
vigilando las orillas donde luego reposar,
sin mirar atrás,
recordando las pasadas situaciones que se fueron,
que se van...
Si es posible y se siente preparado para dejarlo todo atrás y afrontar lo que viene, felicidades. Es un gesto de valentía, ir sin mirar atrás. Si no, felicidades igualmente: disfrute del mundo desde el andén, como ya me dijo.
ResponderEliminarMuchas gracias por sus consejos y comentarios. Le sigo leyendo, cada vez con mayor ilusión. Y una canción muy apropiada.
Saludos
El Eterno Indeciso
Un día despiertas cuando la ciudad hace tiempo que funciona bajo una frenética actividad que te lleva a reflexiones nada profundas sobre la existencia, tus circunstancias y el anhelo por conseguir lo que sueñas...
ResponderEliminarBeto, saludos. Las situaciones que más se quedan con nosotros, nos llenan de ese cansancio de vez en cuando. Esos pequeños instantes con nosotros, los trean a relucir.
ResponderEliminarUn saludo.